NUESTRA HISTORIA

Supermercado y Panadería, Confitería, Fabrica de Pastas y Rotisería “Salinas” son empresas familiares cuyo origen se remonta al año 1956. En 1954, procedente de Galicia, llegó a Montevideo Don Antonio Pita Rey, que como otros inmigrantes buscaba en estas tierras, mediante su trabajo, un futuro de prosperidad. Algunos años más tarde, relataba que con sus ilusiones únicamente traía veinticinco pesetas en el bolsillo y una guitarra en la mano. Una de sus pasiones era la música a la que dedicaba parte de su tiempo de ocio. Seguramente muchos vecinos y amigos de aquellos años tuvieron ocasión de compartir con él alegres momentos tocando la guitarra o el acordeón. Tenían buenas voces él y su esposa, y en muchos momentos de añoranza entonaban canciones de su España querida.

D. Antonio tabajó como empleado en la Panadería “Los Pocitos” de Montevideo; un establecimiento comercia importate para la época donde aprendió su nuevo oficio, del que tenía algunas nociones ya que su familia explotaba un Horno de pan en su aldea en Galicia. Apenas dos años más tarde se instaló en la ciudad de Empalme de Olmos, en la que se localizaba la emblemática fábrica de porcelana, con una pequeña panadería desde la que abastecía también muchas zonas próximas, algunas en la costa: Salinas, Pinamar, Marindia y El Fortín de Santa Rosa. Un año más tarde, cuando ya poseía un negocio propio y un hogar para la familia, vino a reunirse con él su esposa, Doña Hortensia Grandal y su hija mayor. Ambos trabajaron con mucho tesón y comenzaron a establecer los cimientos de una familia y de una empresa.

A finales de la década de 1950, Salinas era un hermoso paraje que se poblaba lentamente y en cuyos médanos y pinares era cada vez mayor el número de casas que ocupaban veraneantes y vecinos, que adquirían los terrenos que la Compañía de Salinas loteaba después de abrir viales. En poco tiempo los médanos y pinares convertidos en lugar de veraneo contaban con un pujante club social, un bonito Hotel cerca de la playa, una escuela y un buen número de comerciantes que se habían instalado en la zona con sus familias. Muchos de los niños de esas familias, padres y abuelos, habitan de forma permanente o han mantenido fuertes lazos con Salinas.

La naturaleza emprendedora de Don Antonio Pita le hizo ver inmediatamente que la zona balnearia era próspera y necesitada de servicios. Adquirieron un terreno en la Avenida Julieta y Yacaré y construyeron una edificación muy destacada para la zona en aquellos años, emplazamiento actual de Panadería, Confitería, Fábrica de Pastas y Rotisería “Salinas” El 8 de diciembre de 1959, D. Antonio Pita y su esposa, Doña Hortensia Grandal, inauguraron su negocio, emplazado muy cerca del Arco, seña de identidad del Balneario. Poco a poco los comercios se fueron trasladando a este entorno, en el que sin duda se ubica el centro actualmente.

Fueron años de dificultades pero nunca falto el ánimo para solucionarlos. Aun se recuerdan los continuos cortes de luz, sobre todo el que se produjo por los efectos devastadores del huracán que a mediados de los años sesenta asoló la costa y destruyo la mayor parte del tendido eléctrico. La capacidad inventiva de Antonio Pita le llevo a traer un tractor que con unas poleas hacia funcionar la amasadora. Se trabajó así al menos 3 días; el pan salía a pesar de los problemas. Muchas veces tuvieron que recurrir a la misma solución cuando el viento provocaba cortes de luz de varias horas. A los pocos años el negocio aumentó sus rubros a Fabrica de Pastas y Heladería y durante las más de seis décadas desde su inauguración esta empresa no dejó de crecer, reorganizarse y renovarse con la finalidad de prestar siempre un buen servicio a una comunidad cuyo número de pobladores no dejó de aumentar, aunque durante varias décadas mantuve su naturaleza de zona de veraneo. La transformación definitiva se produjo a partir de la década de 1990: la costa de Canelones hasta la ciudad de Salinas, se convirtió en una zona residencial, con un notable aumento de población estable. La población costera de Montevideo se extendió a lo largo de la costa de Canelones, tal y como había imaginado D. Antonio Pita que ocurriría.

Además del emprendimiento de Salinas, los esposos pusieron en marcha otros proyecto: en el Km 44 un importante Almacén; en Pinamar, Interbalnearia y Avenida Nogueira, construyeron otra edificación destacada y moderna en la que se instaló la que se consideró una de las panaderías y confiterías más modernas de la segunda mitad de los años 60 y que hoy es el emplazamiento del Supermercado Salinas 2. También hicieron el esfuerzo de adquirir los terrenos colindantes a la Panadería y Confitería y planificaron e iniciaron un gran proyecto empresarial, que las circunstancias económicas del país a finales de la década de los años 70 les impidió culminar.

Los cuatro hermanos, Pita Grandal, después de la pérdida s de sus padres cuando aun tenían mucha vida por delante, mantuvieron siempre la unión de la familia y continuaron la trayectoria empresarial finalizando el proyecto comercial y urbanístico ubicado en Avenida Julieta, entre Yacaré y Nutria. Esta es, sobre todo, una empresa familiar y la familia es la piedra angular del proyecto. Por eso, forma parte también de nuestra historia la pérdida de una querida hermana, Luz Marina, cuya impronta, su saber hacer, su recuerdo y el amor que le profesamos nos acompaña siempre, así como su hijo.

MISIÓN, VISIÓN Y VALORES DE LA EMPRESA

La Misión de nuestra empresa es contribuir al confort, a la salud y al progreso de la Comunidad. Para ello consideramos nuestro principio básico e irrenunciable, cuidar de todos y cada uno de nuestros clientes, proporcionándoles siempre la mayor satisfacción posible con el mejor trato y consideración, trabajando con personal cualificado y con productos de la mejor calidad al mejor precio posible. Para lograr ese objetivo, la organización necesita alcanzar un nivel de productividad que la haga sostenible y rentable. La empresa ha de ser exigente, debe crecer y mejorar y para ello se presta particular y expresa atención a tener una plantilla de empleados satisfecha, competente y comprometida en la organización.

La Visión de la empresa es crecer, manteniendo una expansión progresiva y ser líder en su segmento en las zonas de implantación y siempre ofrecer productos de calidad al mejor precio posible, como medio para cumplir su objetivo fundamental: la satisfacción del cliente.

Los Valores de la empresa son la asunción participativa, por parte de todo el personal, de los principios éticos, de conductas responsables, de actitudes debidas, que en su desarrollo práctico conforman la cultura de la organización y definene el modo de ser, de pertenecer y de comportarse en la empresa, que la identifican y diferencian de otras. El respeto activo al cliente se sitúa en el centro neurálgico de todas las actuaciones de la empresa. También la inclusión de criterios éticos y de justicia en la relación laboral, así como la protección de los derechos de los colaboradores, principal activo interno de la empresa, con empleados estables, satisfechos y comprometidos con la misión de la organización.

El año 2020 nos ha traído una gran pandemia que , con ayuda de Dios, esperamos poder superar para continuar nuestras vidas y esta historia de emprendimiento y trabajo.

Salinas, diciembre de 2020